domingo, 23 de octubre de 2011

Aguas agitadas, muy agitadas

Que a pasado con los pececitos que – otrora – pululaban en maza por las aguas de ese mar que tranquilo nos baña, escasean, aun así nuestras aguas están agitadas, pymes, trabajadores de pesqueras, pescadores artesanales, en realidad es mucha la gente que acusa los efectos de una depredación brutal del recurso a manos de unas pocas empresas pertenecientes a 7 familias que en la practica conforman un oligopolio. Serian los tiburones – dicen ellos – empresarios con alma de escualo, todos gorditos gracias a los generosos aportes de los últimos 3 gobiernos – Frei, Lagos, Bachelet - ¿quién cuida lo que ha logrado sin esfuerzo? nadie, por eso el pescado esta carito, porque arrasaron con muchas especies, incluso algunas pesqueras – menores – han debido importar pescados de Asía para cumplir contratos previamente firmados con JUNJI y JUNAEB, terrible situación.

Esta fresco en la memoria, fue la ley corta de pesca en el gobierno de Ricardo Lagos que en aras de fortalecer a los exportadores sentó las bases de un modelo que permite a las grandes empresas acaparar el producto, veámoslo en números, hace un lustro las merluzas extraídas ascendían a 1.500.000 toneladas y actualmente ese volumen se redujo a solo 300.000, si esto sigue así en 4 años más chao pescado – literalmente – con la merluza. La culpa de esto no es de la jibia, eso es puro tollo dicen, es culpa de la pesca de arrastre y personeros de gobierno presionados por las empresas, las mismas que logran así que les suban las cuotas contraviniendo opiniones del mundo científico. Muchos peces son muy jóvenes y los devuelven muertos al mar, estos cabros no solo depredan, sino además externalizan los pasivos ambientales.

Aseguran que este gobierno es medio esquizofrénico, dice algo en un sentido, después actúa en otro, más raro que pescado con hombros, por ultimo que las empresas dieran buenos empleos dicen, pero viendo que le han estado vendiendo la pesca a mucha de a pie, los trabajadores de empresas pesqueras están echando al agua a sus patrones. Los trabajos generados por el sector son mínimos y además precarios, verdadera basura, hediondos como un pescado muerto puesto un buen ratito al sol, así funciona esta industria y ni se arrugan.

Es cierto, la mayoría de quienes participaron en una meza de negociación termino firmando el documento que hoy esgrime el gobierno, pocos se negaron, los pescadores artesanales dicen que en esa meza de trabajo aparte de hablar puras cabezas de pescado y ser poco representativa, muchos se dieron vuelta la chaqueta porque poderoso señor es don dinero aseguran. Los industriales han vetado a dirigentes y que repartiendo uno a uno – los billetitos – los fueron dividiendo y así lograron prevalecer, otros pescadores dicen que el sector está en estado terminal, la ley del gobierno de Lagos les fijo cuotas imposibles de alcanzar a efectos de despojarlos del recurso, porque dicha ley contemplaba la penalización por el no cumplimiento de las cuotas asignadas para la extracción ¿cómo? deben ceder parte de su cuota al que si puede pescar, a quien si no, las grandes empresas, por lo tanto sus familias en algunos meses del año simplemente pasan hambre.

Escamosos, de la subsecretaria de pesca jamás se ha obtenido respuesta alguna, ojo que por la boca muere el pez, Piñera prometió cambios, aun recuerdan que fue uno de los que en 1991 trabajo fuertemente por la asignación de cuotas, por eso lo instan a retomar el plan cuyo diseño encomendó al ministro Juan Andrés Fontaine, pero que el ministro Longueira echo por la borda tiempo después, por ultimo que paguen dicen las pymes. Si no hay nada de eso, bueno, no les quedara más que hacerles olitas a este gobierno, una más en este constante tusunami, perdón quise decir tsunami, una más de tantas que ya parece no hacer mucho la diferencia, probablemente en el gobierno dirán “que le hace el agua al pescado”.