lunes, 18 de julio de 2011

Cambios de verdad

El cambio de gabinete realizado por Piñera – que muchos esperaban – termino siendo un movimiento forzado por las circunstancias, no era lo ideal para el presidente, de hecho evito cambiar su equipo varias veces, haciendo en este solo pequeñas incrustaciones como Evelyn Matthei y Andrés Allamand, solo en ministerios sectoriales no dándoles cabida – posterior – para que fueran factores en el análisis político que se puede hacer de la actual administración.

Todo eso, hoy cambio, cambio y creo nadie puede no percibir que este cambio de gabinete es mucho mas profundo que el realizado en Enero pasado y que, además, por mantener a Matthei y Allamand, estas figuras se potenciaran con 2 políticos de fuste – inequívocamente – como lo son Chadwick y Longueira. El primero – Chadwick – será mucho más que un vocero, no viene simplemente a reemplazar a Von Baer, el ha sido quien a articulado estrategias durante 20 años, es una persona que sabe interlocutor con los partidos, tiene gran respeto y respaldo para negociar con la oposición, por lo tanto, el nuevo vocero influirá de manera inmediata y hago referencia al Ministerio del Interior. Hinzpeter, no puede ser el mismo, ese que improvisaba ideas como “la nueva derecha”, que hacia análisis funcionales al gobierno para después ser criticado por los integrantes de la Coalición por el cambio – en particular la cúpula de la UDI – no puede y no debe volver a tener esa libertad de disposición verbal estratégica teniendo a Chadwick en la voceria, porque si alguien entiende de estrategias y negociaciones políticas, precisamente ese es el nuevo vocero.

En el caso de economía, debiera seguirse la misma conducta, Pablo Longueira – lo sabe todo el mundo político y el no tan político – alguien que discrepa de forma severa de las teorías de asignaciones de recursos, en particular a tenido encontronazos – de esos que sacan chispas – con el Ministerio de Hacienda, por lo tanto desde el Ministerio de Economía se estará chequeando, matizando, las ortodoxias clásicas aportadas por la dirección de presupuestos.

Lo de Lavín y Golborne, apunta directamente – lo que no esta mal – a proteger 2 posibles presidenciables. Si bien Lavín se entrampo en el dialogo con los estudiantes, un político de su experiencia debe estar preparado para iniciar diálogos con sectores mucho más fuertes, MIDEPLAN tiene que resolver el problema indígena, terminar con los pobres que aun quedan en Chile, también quien abandona – Felipe Kast – le deja listo el Ministerio de Desarrollo Social y unas cuantas leyes que ya están negociadas y a punto de aprobarse.

Felipe Bulnes – aquí no hay 2 opiniones – es la persona mejor calificada y el mas preparado para desenvolverse como ministro, incluso por sobre Longueira y Matthei, es alguien que se entiende muy bien con la oposición, a entendido muy bien los estamentos que permitieron el avance de una serie de reformas en el área de la justicia y por todo lo antes mencionado se le entrega hoy, el ministerio que por historia derriba ministros, educación. Probablemente tendrá mayores desafíos de los que tendrá cualquier otro ministro dentro del gabinete.

Así las cosas – raya para la suma – Pablo Longueira, Evelyn Matthei, Andrés Allamand, Andrés Chadwick y Joaquín Lavín, por nombrar 5 dentro del gabinete, es imposible que la oposición siga diciendo que el equipo de Piñera es tecnócrata y no político. Si el gobierno no mejora su imagen ante la opinión publica, si no logra acuerdos y si no logra hacer una de las mejores administraciones de la historia, una de dos, los Ministros no serán capaz de llevar a cabo las metas porque tropezaron con sus egos o lise y llanamente porque han sido nombrados pero no tendrán las facultades – vía libre – de parte de Piñera, para que puedan ejercer el talento político – tecnócrata en algunos casos – que inequívocamente ellos tienen y que todo el mundo les reconoce.