miércoles, 13 de julio de 2011

Por omisión o por apoyo

Cuando doy una mirada al momento que vive la educación chilena, es cierto, se ve mal la cosa, pero en ningún caso pasamos por la “crisis” que muchos quieren pintar, busco que no se hizo – se hizo – para llegar a esto. Entonces irremediablemente debo retroceder en el tiempo y llegar a 1990, la primera pregunta que me hago es ¿qué habría sucedido si Alwyn solo hubiera encontrado – al momento de asumir – solo las 8 universidades intervenidas en 1973, sin reforma alguna de por medio? Imagino lo que habrían dicho quienes regresaron “la alegría” a Chile, que Pinocho no hizo nada en educación, que era elitista o ignorante, entre otros calificativos – que si bien se gano muchos – hubieran saltado a la palestra.

Pinochet a pesar de lo que muchos sostengan, rompió con los monopolios e instalo cosas completamente novedosas – para lo que se acostumbraba – partiendo por abrir la entrada a las universidades, diversifico e inicio las competencias. Todo comenzó en 1980, donde se dio inicio a la construcción de nuevas universidades, institutos profesionales, lo que aumento ostensiblemente las oportunidades de quienes salían de la enseñanza media, se conformo un sistema más amplio y si bien muchos dicen que fue en esos momentos donde entro el sector privado a la educación, no es menos cierto que eso era lo que requería Chile por esos años.

Se que a muchos les cuesta, pero hagan el intento y piensen ¿que habría pasado en Chile si Pinochet no hubiera hecho cambios en el sistema universitario? creo que encontrar la respuesta resulta sencillo – siempre y cuando se conteste con la mente y no con el corazón – La Concertación habría encontrado miles y miles de jóvenes chilenos sin oportunidad de ingresar a las 8 universidades que existían, una mediocridad generalizada por la falta de competencia, solo cedes regionales que dependerían exclusivamente de las universidades gigantes, no existirían los oficios de calidad técnica, miles de cientos de millones de dólares por la falta de inversionistas privados y falta de infraestructura, entre otras cosas.

Que habría hecho La Concertación ante la presión de las empresas, claro, reclamando por técnicos de excelencia, quizás hoy tendríamos un instituto algo así como, Instituto Tecnológico de Chile, con 94 sedes, con alumnos endeudados hasta el cogote con el famoso crédito con aval del estado. Que habría hecho La Concertación ante la problemática de redimensionar las 2 grandes universidades del estado, nada, no habría tenido las agallas para hacerlo.

La concertación habría estado acorralada, acorralada por los cientos de miles de jóvenes que hoy protestan en las calles, pero que de no ser por Pinocho, quizás hoy solo estarían en la calle, carentes de toda perspectiva. De no ser por Pinocho, a La Concertación le habrían faltado durante sus 20 años de gobierno los profesionales que colaboraron leal y fielmente con sus ideales. No me creen, es simple, por todo lo antes mencionado fue que La Concertación prefirió consolidar la institucionalidad de Pinochet, por eso nunca intento cambiar un ápice de esta, así que a mi no me vengan con tonteras – como a muchos más – son ellos tan culpables, por omisión o por apoyo de lo que hoy sucede.