El presupuesto nacional esta en el ojo de la noticia – siempre sucede en esta época – por las pequeñeces políticas, los problemas, las peleas que genera y en muchas ocasiones esto resulta muy sano, ya que discutir partida por partida siempre resulta ser mejor. Hoy hay que enfocarse en educación – el tema del año – y en buena hora que se instalara de esta forma, es una muy buena cosa saber que el Ministerio de Educación será el que tendrá el mayor presupuesto del país, siempre esto se dio en el Ministerio del Trabajo, claro porque aquí se deben hacer pagos de post natales, de pensiones, entonces no es un gasto corriente necesariamente, en educación en cambio la buena noticia es doble, será el ministerio con más recursos – el que se lleva más plata del presupuesto nacional – con más de 11 mil millones de dólares.
Que esto suceda, es muy importante, es de una relevancia única y sabe algo, esto viene a cumplir una máxima: “pon el bolsillo donde pongas la boca”, es decir, gasta la las lucas en donde dijiste que hay que gastarla, fácil y simplecito, de lo contrario es llenarse la boca con palabras vacías, pero al momento de sacar la billetera, nada. Entonces si el gobierno – efectivamente – a través del presupuesto nacional pone el bolsillo, pone las prioridades presupuestarias donde pone la boca, porque dice que le interesa la educación como prioridad, quiere decir que al menos triunfa en su coherencia.
Más relevante aun – porque lo anterior es lo cuantitativo – es lo cualitativo, donde se pone esa plata, una cosa es inyectar más recursos pero cuales son las partidas donde se pondrán las lucas, aquí es relevante saber donde se pone la lupa – el doble clic – cuales son los elementos que generan más atención, más demanda de recursos y aquí me atrevo a esbozar una intención, ojala efectivamente la mayor cantidad de dinero se destine a las subvenciones preferenciales, vayan destinadas a que efectivamente de aquí al 2018 se produzca – progresivamente – la promesa del presidente Piñera, la duplicación de subvención estatal a colegios ya subvencionados. Esto es ahora y urgente, esto es la oportunidad de que el gobierno muestre que hay una intención real de mandar las platas del fisco – la plata de todos – a los más necesitados, hay que tratar de ir equiparando la cosa, hay que dar más infraestructura, mejores pagos a sus profesores, programas especiales, poder en definitiva nivelar la cancha.
Siendo esto lo más importante, en cuanto a las universidades es importante el apoyo y entregar más recursos, más recursos básales para que las casas de estudio puedan tener más piso desde donde comenzar, entre otras cosas esto va permitir seguir bajando los aranceles, porque tener a la Chile o a la Católica – símbolos de calidad educacional - cobrando 300 o 400 lucas mensuales no calza, no da simplemente. Es interesante también que se aporte plata desde el estado para créditos fiscales o con aval del propio para créditos a particulares en universidades privadas, que es donde ingresa la mayoría para que efectivamente los intereses no estén en el orden del 6 o 7%, si no del 2% y ojala menos.
Queda esperar – ya no queda nada – para saber si efectivamente será educación quien concentre la mayor cantidad de recursos del presupuesto nacional e insisto, se debe ver si es efectivo que donde se puso la boca ahora también seremos capaces de poner la billetera.