Los últimos días se ha hablado de rebelión mapuche en la Araucania, que se necesita mano dura, mandar al ejército y volver a traer al coronel Cornelio Saavedra para que valla a “pacificar” a punta de balas, en el fondo esto es lo que están pidiendo con un lenguaje un poco más elegante. Aparecen hechos que demuestran porque pasan las cosas, no son estados emocionales alterados que sufren ciertas personas, ni hay agentes de las FARC infiltrados entre los mapuches que lo han levantado a la rebelión.
Hemos conocido – en estos días – un remezon tremendo en el principal organismo que se preocupa por el tema indígena en nuestro país, el resultado es que hay una cantidad – record – de sumarios internos, 7 sumarios que siguen pendientes, 28 que están en pleno curso y en distinto grado de tramitación, otros – los menos – que ya se han resuelto. Consecuencias, si y muchas, con todos estos antecedentes el gobierno – muy a su pesar – a tenido que tomar medidas francamente dramáticas, 4 destituciones de altos funcionarios, 2 traslados, todo esto en CONADI, organismo que precisamente fue creado por el estado chileno para tratar los asuntos indígenas. Además hay 7 remociones en el programa Orígenes que tiene vínculos también con el tema en cuestión. En suma, uno no puede menos que preguntarse ¿qué a pasado aquí? ¿por qué este terremoto en las instituciones?
Es que ha ocurrido de todo, los sumarios hablan de todo. No es solo falta de capacidad de gestión e ineficiencia – de funcionario inepto – tampoco es solamente falta de transparencia lo que ya es gravísimo. Pero lo que más hay es falta de probidad, lo menos que se sospecha es una cierta colusión entre funcionarios con miembros de organizaciones mapuches – los menos claro – y además entre propietarios de tierra para elevar artificialmente el valor de los terrenos y que el estado tenga que pagar más. Esto es lo menos – si, lo menos – que ha salido a la luz con estas investigaciones.
Con todo esto se entrampan – aun más – las situaciones, se demoran. Pero el tema de la especulación de las tierras, da la transparencia con las que se adquieren, con los beneficios y gastos que han sido dispendiosos para el estado – o sea nosotros – que tiene que financiar cada uno de estos proyectos. Los sumarios aun no se dan a conocer porque se encuentran en la etapa donde los afectados pueden hacer sus descargos, pero ya hay suficiente anticipo en el ambiente para darse cuenta – mas o menos – lo que pasaba en CONADI y lo que empujo al gobierno a cortar cabezas.
Mas aya de lo que se va destapar, lo que todo esto nos dice es que los organismos no han funcionado, la institucionalidad no ha funcionado y que la rebelión y las protestas de muchas comunas mapuches tiene plena justificación, porque sus temas objetivamente no estaban siendo tratados como correspondían. Entonces no sigamos buscando mas represión como única solución a los problemas, si no miremos hacia adentro porque ninguna rebelión es porque si, están reflejando un abandono en los acontecimientos, una enorme incapacidad de resolución en el tratamiento de los temas indígenas, por eso se vive este caos en el sur de Chile.
Hemos conocido – en estos días – un remezon tremendo en el principal organismo que se preocupa por el tema indígena en nuestro país, el resultado es que hay una cantidad – record – de sumarios internos, 7 sumarios que siguen pendientes, 28 que están en pleno curso y en distinto grado de tramitación, otros – los menos – que ya se han resuelto. Consecuencias, si y muchas, con todos estos antecedentes el gobierno – muy a su pesar – a tenido que tomar medidas francamente dramáticas, 4 destituciones de altos funcionarios, 2 traslados, todo esto en CONADI, organismo que precisamente fue creado por el estado chileno para tratar los asuntos indígenas. Además hay 7 remociones en el programa Orígenes que tiene vínculos también con el tema en cuestión. En suma, uno no puede menos que preguntarse ¿qué a pasado aquí? ¿por qué este terremoto en las instituciones?
Es que ha ocurrido de todo, los sumarios hablan de todo. No es solo falta de capacidad de gestión e ineficiencia – de funcionario inepto – tampoco es solamente falta de transparencia lo que ya es gravísimo. Pero lo que más hay es falta de probidad, lo menos que se sospecha es una cierta colusión entre funcionarios con miembros de organizaciones mapuches – los menos claro – y además entre propietarios de tierra para elevar artificialmente el valor de los terrenos y que el estado tenga que pagar más. Esto es lo menos – si, lo menos – que ha salido a la luz con estas investigaciones.
Con todo esto se entrampan – aun más – las situaciones, se demoran. Pero el tema de la especulación de las tierras, da la transparencia con las que se adquieren, con los beneficios y gastos que han sido dispendiosos para el estado – o sea nosotros – que tiene que financiar cada uno de estos proyectos. Los sumarios aun no se dan a conocer porque se encuentran en la etapa donde los afectados pueden hacer sus descargos, pero ya hay suficiente anticipo en el ambiente para darse cuenta – mas o menos – lo que pasaba en CONADI y lo que empujo al gobierno a cortar cabezas.
Mas aya de lo que se va destapar, lo que todo esto nos dice es que los organismos no han funcionado, la institucionalidad no ha funcionado y que la rebelión y las protestas de muchas comunas mapuches tiene plena justificación, porque sus temas objetivamente no estaban siendo tratados como correspondían. Entonces no sigamos buscando mas represión como única solución a los problemas, si no miremos hacia adentro porque ninguna rebelión es porque si, están reflejando un abandono en los acontecimientos, una enorme incapacidad de resolución en el tratamiento de los temas indígenas, por eso se vive este caos en el sur de Chile.