Si bien todos los datos todavía no están disponibles, a partir de lo que hay disponible se pueden plantear cuatro conclusiones de la última encuesta CEP antes de las elecciones.
Sebastián Piñera sigue en primer lugar, pero está lejos de tener la victoria asegurada. Habrá segunda vuelta y Piñera quedará alrededor de 8% del mágico número que necesita para ser presidente de Chile. A menos que sea capaz de sumar votos de los que queden fuera de la segunda vuelta, no ganará. Sus críticas a Marco Enríquez-Ominami deberían moderarse. Lo que necesita es sumar la votación de aquellos que votan pro ME-O y no quieren a la Concertación. Pero tampoco puede inflar a ME-O demasiado. Si el diputado ex Concertación pasa a segunda vuelta, es mucho más competitivo que Frei. Piñera debería esperar que Frei y ME-O se peleen a muerte en primera y después aprovecharse de lo difícil que resultará sanar heridas con rapidez en el mundo concertacionista. A partir de esta encuesta, Piñera debe tener un cauto optimismo.
Eduardo Frei ha demostrado una vez más que su candidatura resiste. Vuelve a bajar, pero sigue en segundo lugar. Es menos competitivo en segunda vuelta. Ya que todavía existe la posibilidad de que ME-O lo supere en primera, no puede bajar la guardia ante el candidato cuyos votos desesperadamente necesitará si pasa a segunda vuelta. Difícil disyuntiva. Si efectivamente confía en que su votación es dura y resistirá la embestida de ME-O, debería comenzar a pensar ya en segunda vuelta y a hacerse cargo de las demandas que representa y simboliza ME-O. Si sigue ignorando y atacando a ME-O, habrá que concluir que no cree que su apoyo sea tan firme como dice su comando. Mientras más critique a ME-O, más evidente es que no siente seguro su paso a segunda vuelta.
Marco Enríquez-Ominami sube, pero demasiado lento. A esa velocidad no alcanzará a Frei. Es más competitivo en segunda vuelta, lo que le ayudará a construir un mensaje potente para las últimas semanas de campaña. Necesitará los votos de toda la Concertación en segunda vuelta, por lo que parecería razonable que los comience a buscar con entusiasmo, humildad y respeto en primera. Sólo podrá ser presidente si se convierte en el candidato de la Concertación plus. La Concertación y mucho más. Pero no se puede concentrar solo en el “mucho más” tiene que sumar también a la Concertación.
Jorge Arrate, los votos de la izquierda dura son clave en segunda vuelta. Se sumarán a Frei o a ME-O, pero pondrán condiciones. Las condiciones serán más difíciles de satisfacer para ME-O, porque es más antisistema y, al acercarse a la izquierda extra parlamentaria, podría perder votos. Pero al final del día, la izquierda extra parlamentaria quiere evitar que la derecha llegue al poder.
¿Ganador de la CEP? Piñera, con cauteloso optimismo. Mientras más se polarice la elección entre Frei y ME-O, menos difícil será para Piñera sumar esos votos claves que necesitará para ganar en segunda vuelta.
Sebastián Piñera sigue en primer lugar, pero está lejos de tener la victoria asegurada. Habrá segunda vuelta y Piñera quedará alrededor de 8% del mágico número que necesita para ser presidente de Chile. A menos que sea capaz de sumar votos de los que queden fuera de la segunda vuelta, no ganará. Sus críticas a Marco Enríquez-Ominami deberían moderarse. Lo que necesita es sumar la votación de aquellos que votan pro ME-O y no quieren a la Concertación. Pero tampoco puede inflar a ME-O demasiado. Si el diputado ex Concertación pasa a segunda vuelta, es mucho más competitivo que Frei. Piñera debería esperar que Frei y ME-O se peleen a muerte en primera y después aprovecharse de lo difícil que resultará sanar heridas con rapidez en el mundo concertacionista. A partir de esta encuesta, Piñera debe tener un cauto optimismo.
Eduardo Frei ha demostrado una vez más que su candidatura resiste. Vuelve a bajar, pero sigue en segundo lugar. Es menos competitivo en segunda vuelta. Ya que todavía existe la posibilidad de que ME-O lo supere en primera, no puede bajar la guardia ante el candidato cuyos votos desesperadamente necesitará si pasa a segunda vuelta. Difícil disyuntiva. Si efectivamente confía en que su votación es dura y resistirá la embestida de ME-O, debería comenzar a pensar ya en segunda vuelta y a hacerse cargo de las demandas que representa y simboliza ME-O. Si sigue ignorando y atacando a ME-O, habrá que concluir que no cree que su apoyo sea tan firme como dice su comando. Mientras más critique a ME-O, más evidente es que no siente seguro su paso a segunda vuelta.
Marco Enríquez-Ominami sube, pero demasiado lento. A esa velocidad no alcanzará a Frei. Es más competitivo en segunda vuelta, lo que le ayudará a construir un mensaje potente para las últimas semanas de campaña. Necesitará los votos de toda la Concertación en segunda vuelta, por lo que parecería razonable que los comience a buscar con entusiasmo, humildad y respeto en primera. Sólo podrá ser presidente si se convierte en el candidato de la Concertación plus. La Concertación y mucho más. Pero no se puede concentrar solo en el “mucho más” tiene que sumar también a la Concertación.
Jorge Arrate, los votos de la izquierda dura son clave en segunda vuelta. Se sumarán a Frei o a ME-O, pero pondrán condiciones. Las condiciones serán más difíciles de satisfacer para ME-O, porque es más antisistema y, al acercarse a la izquierda extra parlamentaria, podría perder votos. Pero al final del día, la izquierda extra parlamentaria quiere evitar que la derecha llegue al poder.
¿Ganador de la CEP? Piñera, con cauteloso optimismo. Mientras más se polarice la elección entre Frei y ME-O, menos difícil será para Piñera sumar esos votos claves que necesitará para ganar en segunda vuelta.