sábado, 16 de octubre de 2010

¿Por qué CODELCO no puede crecer?

Dentro de las principales empresas del mundo en el rubro minero, encontramos empresas tan extrañas como las chinas, si pensamos en la tendencia comunista del país asiático, tenga empresas en la bolsa y levantando mercados internacionales. Esto a logrado que las empresas mineras chinas lograran un nivel de desarrollo significativo accediendo a fuentes de capital que permiten su expansión.

Hoy en día, nosotros vemos un CODELCO con un desarrollo de inversión relativamente importante pero que mantiene su actividad solo dentro del país, vemos una empresa que no ha podido crecer a niveles internacionales que quizás los tiempos modernos le permitirían.

Que la principal empresa minera del país crezca, es un desafío que Chile tiene. Algo que se deberá debatir en futuros gobiernos, ya que en el actual no existe la intención de incorporar capital privado a CODELCO – para evitar suspicacias – pero sin embargo es un tema que como país se debe analizar, donde se requiere un debate amplio y un consenso aun mas amplio para avanzar en la dirección correcta.

Al ver las primeras 40 empresas del mundo en el rubro minero, uno se pregunta por qué Chile no figura dentro de este grupo. Dentro de estas empresas podemos encontrar una peruana dentro de las 15 primeras, empresas canadienses, italianas y como mencione antes ninguna chilena, exceptuando Antofagasta Minerals, que aparece mencionada cómo una empresa representante del Reino Unido, debido a que su capital proviene de Inglaterra. Resulta curioso – por decir lo menos – que un país minero, con las mayores reservas de cobre en el mundo, de nitrato, de reñíos y muchos otros minerales, no figure ninguna empresa chilena dentro de las primeras 40 a nivel mundial.

La diferencia – lo que provoca esto – es mas ideológica que económica, cuando se analiza por qué CODELCO no se desarrolla con mayor fuerza, una de las principales razones es porque sus necesidades de capital deben ser cubiertas por su reinvención, es decir por la caja que genera y obviamente por la capacidad que tenga su dueño – en este caso el estado de Chile – de mantener en la compañía los suficientes recursos para su futuro desarrollo.

El estado de un país siempre tiene necesidades importantes que satisfacer, cualquier proyecto productivo va competir directamente con las necesidades que existen en hogares, hospitales, áreas verdes, caminos, educación para quienes lo necesitan y la rentabilidad social de un proyecto en estas materias obviamente va ser más alta y más urgente que cualquier rentabilidad económica que un proyecto pueda tener, por bueno que este sea. Esa disyuntiva la va tener siempre un gobierno, sin embargo CODELCO no puede usar otras fuentes de financiamiento, porque sus yacimientos, sus activos son propiedad del estado de Chile y no pueden ser propiedad de un tercero, por lo tanto se cierra el camino de un “proyecto final”, esto significa que CODELCO no puede crear la estructura de financiamiento de un yacimiento utilizando mecanismos de mercado utilizando por ejemplo capital privado, porque tendría que entregar sus flujos en garantía, lo cual violaría el principio constitucional y la ley orgánica que la origina.

Estoy convencido que el nuevo gobierno corporativo de CODELCO es un paso importante y un avance significativo al debate de estas ideas y el análisis de alternativas para su financiamiento y por ende un mejor crecimiento. Creo que una vez que CODELCO lleve unos años funcionando con un gobierno corporativo y en un ambiente donde no este la influencia política de que hacer empresarial habrán propuestas interesantes que nuestro país podrá analizar.

Lo que se ve hoy en día en Chile, es un ciclo de inversión interesante proyectable para esta década, así como en los 90 hubieron importantes inversiones que llevaron a producir las 5.400.000 toneladas de cobre que hoy en día se producen, se prevén para los próximos 7 años inversiones por el orden se 45.000.000 de dólares en el sector minero. Esta inversión significa que país pase de producir esas 5.400.000 toneladas a 7.500.000 hacia el fin de la década. Sin duda una muy buena noticia por la cantidad de trabajo, actividad, posibilidades de desarrollo que generan este nivel de inversión tanto en las zonas mineras, como en el resto del país por el efecto contagio o derramamiento que producen las inversiones en el sector minero.

La meta del actual gobierno es apoyar este desarrollo en forma activa dentro del sector minería y bajo la premisa de la creación de 1 millón de empleos hacia el año 2014 como una meta fundamental. Este plan se soporta en un crecimiento sustancial del país en el rango del 6% actual para el periodo 2010-2014.

Estas metas y este desarrollo se conseguirían más fácil si se lograra materializar el plan de inversiones, es así como cada uno de los actores deben desarrollar su labor. Por una parte el gobierno de Chile con un plan regulatorio, definir normas claras y estables que perdure en el tiempo y que otorgue seguridad a la inversión que se materializara, una estructura impositiva, moderna, clara y estable.