sábado, 6 de noviembre de 2010

Que pelotudos mas grandes

Hoy es el día del chilenismo, todos dirán que estoy loco, que eso es el 18 de septiembre y si, tienen toda la razón. A lo que me refiero, es que hoy afloro lo mejor de nuestra fauna periodística y una característica del compatriota que parecían haber quedado en el pasado, todos ellos a esta altura parecen atletas dignos de disputar una medalla de oro en cualquier olimpiada, es que las vueltas de carnero son sencillamente impresionantes – tiembla Tomas González – Los que antes criticaron la arrogancia del señor Mayne-Nicholls y las constantes incongruencias de Marcelo Bielsa, hoy los lloran casi desconsoladamente, hoy opinan que son lo mejor en la historia del futbol chileno. Claro eso es hoy, porque ayer no pensaban ni opinaban así.

Acaso esto debiera sorprenderme, claramente no. Es que no es la primera vez que algo así ocurre y no será la ultima, esta en el ADN del chileno – hablando del ADN me acorde del pobre de Guarello, del cual ya hablaremos – o somos los mejores del mundo y todo es bueno, magníficamente impresionante o somos lo peor, la ultima escoria y no merecemos ni siquiera el aire que respiramos. Entonces ya deberíamos estar acostumbrados a estos “cambios de temperatura” lo que ayer era un frío polar, hoy puede ser un calor intenso.

También he caído en esos baches, porque negarlo si soy más chileno que súper taldo. Pero para que no se diga que esta columna – humilde y muy sencilla – es antojadiza y tiene mucho de lo que estoy criticando en ella, habrá que poner pruebas “contantes y sonantes” como dirían los antiguos.

Comencemos por Juan Cristóbal Guarello, que hoy escribe una columna en la revista El Grafico, la cual titula como “El día en que todos perdimos”. Claro, es que el doble oficial de la bestia – película Disney – pierde mucho con la salida de Bielsa, porque siempre fue un firme retractor a los métodos del rosarino y a la arrogancia de Harold, pierde Guarello porque ya no podrá disparar su artillería – de poca monta – como lo hizo en forma constante durante 3 años en el programa en el que participa en ADN radio Chile, contra estos 2 personajes del futbol chileno. Pero hoy siente y lamenta su partida, ¿extraño no?.

Otro ejemplo es Felipe Bianchi, quien agradeció en cámara a Mayne-Nicholls y Bielsa por todo lo que le entregaron al futbol chileno. Que lamentable que exista twitter, lamentable porqué fue este el medio que el ex CQC uso para atacar al DT argentino, solo por dar un dato exacto, uno de los escritos de 140 caracteres del periodista deportivo dedicado al “loco” fue el siguiente: “es fácil ser populista y ponerse en el lugar del pobre, pero no se debe decir que robar esta bien" – en alusión a las declaraciones de Bielsa tras el terremoto del 27 de febrero – después prosiguió escribiendo: "Yo prefiero decir que quien se roba un plasma es un pobre y triste huevón ladrón. Más respeto con la gente honesta", fueron los dardos que el hombre ancla del deporte en CHV lanzo contra el rosarino. O sea, de hacer un juicio moral y de valores en contra de los comentarios de Bielsa, paso a agradecerle todo lo que “le enseño a los chilenos”… sencillamente y como diría Peter Veneno, im-presionante.

Que decir de Fernando Solabarrieta – el llorón oficial de Chile – aunque debo conceder un punto a su favor por no mostrar su emoción en cámara esta vez, como lo hizo en el pasado, no puedo by-pasear los comentarios emitidos por el hijo ilustre de Puerto Williams. Solabarrieta aseguro en su programa radial que con la salida de Bielsa se acababa un estilo de juego, estilo que según el – ahora – fue el mejor en la historia del futbol de nuestro país y yo no digo que no sea así, lo que si digo es que hay que ser muy “cara de raja” para cambiar el discurso en la forma que lo hizo el periodista de TVN, porqué fue precisamente el quien el año 2008 despedazo el sistema táctico implantado por el ex seleccionador chileno, asegurando que el sistema táctico no podía estar por sobre los jugadores y que un técnico que no escuchara a sus dirigidos, no llegaría muy lejos en su cargo.

Para que hablar del monologo que se mando sobre Harold Mayne-Nicholls, que era un hombre respetable, que sus ideas le hicieron bien al futbol chileno, que nuestro país no se podía permitir perder un dirigente como el y así suman y siguen lo elogios, pero que creen, claro, este no era su discurso en el pasado – pasado inmediato por cierto – si fue el mismo Solabarrieta quien escribió en el Mercurio una columna despedazando la labor de Mayne-Nicholls en cuanto a la competencia local se refiere, entre otras cosas el teñido y tostado periodista escribió que el presidente del futbol chileno no se había preocupado nunca del campeonato nacional, que Colo-Colo, Universidad de Chile y Universidad Católica si merecían mas dineros por los excedentes del Canal del Futbol por ser ellos los mas transmitidos semana a semana, que Harold se mostraba como alguien arrogante, inalcanzable, intocable, es más, aseguro que Mayne-Nicholls se creía un semi dios del futbol chilensis.

Podría nombrar a una decena de periodistas deportivos más y a otros tantos de otras latitudes de la actualidad chilena, pero puede que mañana amanezca atravesado en la cama, que no me guste el desayuno o el almuerzo, que vaya de compras y no encuentre lo que busco y mi opinión sobre ellos cambie, ya saben, soy chileno. Entonces, porque nombrar a Guarello, Bianchi y Solabarrieta, eso es más sencillo de explicar, porque pase lo que pase el día de mañana y el resto de mi vida, mi opinión sobre ellos será la misma… que pelotudos más grandes.