Hay decirlo – y decirlo de entrada – 700 millones de dólares es más que cero,
por lo mismo no veo ni imagino a nadie en el Congreso argumentando que porque
no se hizo una reforma tributaria mayor, entonces no se aprobaran los ajustes
anunciados por cadena nacional y los cambios que estos permitirían en educación. Se
debiesen aprobar los 700 millones porque simplemente se necesitan, a no
confundir las críticas por lo que se pudo hacer con lo presentado.
Hay personas como el senador Hernán Larrain que han señalado que hubo “mucho
ruido y pocas nueces”, la oposición dice que fue “una reformita”, personas que
han trabajado el tema en términos educativos como Mario Braibus han señalado
que esto puede ahondarse incluso más, refiriéndose al tema segregación. Sin embargo,
lo que estará en el fondo de la discusión – en el corto plazo – va hacer como
dijo el investigador de Libertad y Desarrollo, Luís Larrain, una inversión que
no se considerara mezquina. Buena parte de la coalición de Sebastián Piñera, esperaba que no se hicieran grandes ajustes en materia de empresas, subir del 18,5 al
20% el impuesto de primera categoría era algo sabido hace ya bastante rato, algo
que las empresas comenzaron a pagar hace ya casi 5 meses, porque de todas
maneras ese fue el monto que asigno en términos “temporales” después del
terremoto, en una suerte de escala que bajaba al 17% y que se mantenía, por lo
que todos calcularon que el 20% seria el costo a futuro.
Algunos presidentes de conglomerados empresariales han señalado algo que
el economista Hernán Biggi a dicho cada vez que ha tenido la oportunidad para oponerse
a los aumentos de impuestos. Lo que el dice es que a la corta o a la larga
somos nosotros – las personas – quienes pagamos los impuestos, porque las
empresas – lo que hacen – suben lise y llanamente los precios de sus productos.
Así ya lo han planteado también varios empresarios, dicen que aquí habrá un
ajuste en los precios de sus productos para controlar el mayor costo de lo que
significa esta reforma. Más aun, hay ciertas cosas que se pueden hacer, por ejemplo
justificar costo-beneficio.
Cuando hablamos del tema “elusión”, el presidente y el Ministro de
Hacienda – Felipe Larrain – plantearon que eso tenia que ver básicamente con las
franquicias que tienen las empresas extranjeras a la hora de planificar sus
pagos de impuestos, pero una de las cosas más importantes – lo he escrito muchísimas
veces en este blog y otras columnas – la manera más importante para evadir
impuestos de forma “legal” es el FUT, el cual se usa precisamente para que las
mayores fortunas no paguen impuestos, colocan sus utilidades – sin retirarlas –
en este fondo y se mueven de distintas formas, a través de distintos
instrumentos – todos legales – que hacen que ellos simplemente NO paguen
impuestos o que paguen muy pocos.
No hay muchas voces que indiquen el no uso del FUT como base para
intentar eludir el pago de impuestos, no hubo una sola palabra al respecto en
el ajuste tributario anunciado por Piñera, y era una de las cosas que se
esperaban y no sucedió, ninguna modificación a los “sistemas legales” de elusión,
no solamente de las empresas extranjeras, sino también de las personas que
pagan el GLOBAL COMPLEMENTARIO en Chile. Habrá que ver como se recibe esto en
el Congreso, no debiese haber problema para su aprobación, principalmente por
lo que dije al principio, porque 700 millones de dólares son mucho más que
cero, porque se necesitan todos los millones que sean posibles conseguir para
educación, y precisamente para eso van estos 700 millones.