Lo que supimos hoy es más que una noticia deportiva, es una noticia social, es una noticia política, es una noticia hemisférica, es una noticia que nos convoca. Brasil – Rió de Janeiro y porque no decir Sudamérica – es la cede de los Juegos Olímpicos 2016.
Que significa esto, enfocándonos netamente en lo que al país organizador se refiere, Brasil hace cuantos años era un gigante dormido, por cuantos años hicimos mofa de la frase “el país mas grande del mundo”, porque era el sueño de solo los brasileros, pero nuestro aliado natural en este lado del mundo – aunque seamos uno de los dos países que no limitemos con ellos – Brasil desde la “era Lula” comenzó a despertar, despertó con un sueño romántico, con el sueño de un político poco tradicional, de un político que proviene de la base obrera, un político que supuestamente no tenia las capacidades de alfabetización propias para transformar a esa enorme nación. Todos sonreímos y muchos otros escaparon del “Brasil de Lula” porque parecía terrorífico lo que pasaría con ese país gigantesco, bueno, hoy este señor nos acaba de tapar la boca a todos, demostró que es un líder mundial, Lula se graduó de líder universal.
Hoy Brasil ya no solo es potencia política, potencia económica, potencia cultural y este Brasil – mas bien Lula – es capaz de cerrar su mandato, porque habrá elecciones muy pronto, de poner a su país en este escenario y tambien lo pone señalando algo que es simplemente impensado: el año 2014 Brasil será cede de la Copa Mundial de Fútbol y el año 2016 de la cita de los anillos.
Es decir la primera década de este milenio que recién se inaugura, será la década del Brasil total, lo que sembró Lula, lo cosechara todo su pueblo y porque no, todos los latinoamericanos. Es un sueño digno de convivir como continente y hacerlo propio.
Que significa esto, enfocándonos netamente en lo que al país organizador se refiere, Brasil hace cuantos años era un gigante dormido, por cuantos años hicimos mofa de la frase “el país mas grande del mundo”, porque era el sueño de solo los brasileros, pero nuestro aliado natural en este lado del mundo – aunque seamos uno de los dos países que no limitemos con ellos – Brasil desde la “era Lula” comenzó a despertar, despertó con un sueño romántico, con el sueño de un político poco tradicional, de un político que proviene de la base obrera, un político que supuestamente no tenia las capacidades de alfabetización propias para transformar a esa enorme nación. Todos sonreímos y muchos otros escaparon del “Brasil de Lula” porque parecía terrorífico lo que pasaría con ese país gigantesco, bueno, hoy este señor nos acaba de tapar la boca a todos, demostró que es un líder mundial, Lula se graduó de líder universal.
Hoy Brasil ya no solo es potencia política, potencia económica, potencia cultural y este Brasil – mas bien Lula – es capaz de cerrar su mandato, porque habrá elecciones muy pronto, de poner a su país en este escenario y tambien lo pone señalando algo que es simplemente impensado: el año 2014 Brasil será cede de la Copa Mundial de Fútbol y el año 2016 de la cita de los anillos.
Es decir la primera década de este milenio que recién se inaugura, será la década del Brasil total, lo que sembró Lula, lo cosechara todo su pueblo y porque no, todos los latinoamericanos. Es un sueño digno de convivir como continente y hacerlo propio.