Este loco año dejo a muchos bastante averiados, para muchos fue un año nefasto que hizo agua en todas sus formas, simplemente para el olvido. Mejor pensar que este año nunca existió, la iglesia las vio negras, se paso el año – completito – pidiendo disculpa y perdón, todos sabemos porque. Otros subieron, los estudiantes llegaron para desordenar el gallinero como nunca antes, así las cosas La Concertación y La Alianza sufrieron todo el rigor de este remezón, Renovación Nacional es un partido figurado, la UDI ve como el eje gravitacional de la política chilena se inclina hacia la Izquierda y así comenzó el sube y baja, que se establece en nombres específicos de lado y lado, Matthei y Longueira haciendo suyas políticas – bastante populistas – que antes jamás habrían sido abrigadas por la Derecha chilena, Ignacio Walker no fue capaz de imponerse como el líder de la Democracia Cristiana y Carolina Tohá tiene una presidencia – partido por la democracia – totalmente irrelevante ante la figura del pelmazo de Guido Guirardi.
El presidente Piñera tampoco recordara con mucha nostalgia este 2011, se derrumbo esa locura gerencial que hacia resolver temas país desde un punto de vista técnico, eso se acabo. Se le vio errático, el y su gobierno se la pasaron atajando penales, también hizo cosas positivas – claro que si – pero todo eso se vio eclipsado ante su falta de pericia frente a los conflictos sociales. Al gobierno se le vio pésimo en el tema “seguridad pública”, se dedico a transferir responsabilidades a terceros y como muchos dicen este periodo ya se acabo, el 2012 vamos a estar ya en carreras electorales, además de otras cositas. No habrá grandes reformas que apalanquen el desarrollo sustentable, lo que se ve es a Piñera y compañía esperando que Chile sume 19 mil dólares per cápita, de esa manera y por arte de magia seremos un país desarrollado. Así no pasa nada, tal y como ocurre con organizaciones – tal como ocurre con los partidos políticos – parecen de otra galaxia y de otro tiempo, la CUT, este año quedo de manifiesto su desvalorización, sus autoridades siguen siendo las mismas que en época de dictadura – casi 40 años – Arturo Martínez paso de vicepresidente a máxima autoridad y eso desgasta a cualquier agrupación sindical por mas que se quiera negar.
Un año malo para carabineros- estresante – marcado por el escándalo, casos de corrupción y violencia en las marchas. El discurso ambientalista este año dejo de ser eso, un simple discurso, demostrando que el cambio de paradigma en nuestra tierra es un hecho, 2 marchas con más de 100 mil personas por la Alameda – en el primer trimestre – dicen mucho de una sociedad que ya no se traga que los proyectos de inversión son buenos porque son buenos no mas, es que la calidad de vida es también una variable a tabular en cualquier medición. Fue el año de los consumidores y las organizaciones ciudadanas, ellos suben – como la espumita – sin ninguna duda, la galla tomo conciencia, es de seguro una de las cosas buenas de la administración Piñera que supero en esta materia a los gobiernos de La Concertación, influyo en esto la acción fiscalizadora del gobierno, la notable función del SERNAC, se estableció una empatia con la ciudadanía y se logro que esta defendiera sus derechos como nunca lo hizo antes.
Mi equipo, Colo-Colo fue a la baja, nadie sabe bien como calificar a la escuadra alba, pero efectivamente existe un neologismo chilensis que sirve para graficar su año 2011, “un quipo pasao a caca”, donde todo el que llego termino “pasao a caca”, mi Colo-Colo el club más manoseado por la politiquería chilena, de hecho es el único club de los llamados grandes – aunque es el único realmente grande – no es dirigido por hinchas del equipo y esos empresarios a cargo de la institución anduvieron como la mona. Es más, los empresarios andan como la mona porque la gente se chorio con que un grupito de “avispados” se mal acostumbrara a ganar y a introducirle al resto de los chilenos el aparato reproductor masculino en el globo ocular, si quiere contamos, colusión de buses, colusión de pollos, esclavitud de extranjeros en labores agrícolas, el mega fraude de La Polar, la actitud poco deferente de Anglo-American que puso una vez más en relieve la necesidad de un nuevo trato con la minería, robo de agua, la negativa a la reforma tributaria, los empaquetadores que pagan para trabajar, no, si en verdad la cago, la lista es larga. Seguramente este 2011 será recordado como el año en que a los empresarios se les acabo la sandunga. Y los beatos de Milton Friedman, con todo esto de seguro deben estar revolcándose en su tumba.